¿Qué es la enfermedad del ciervo zombi?, ¿podrían contagiarse los humanos?

Hola, amigos, ante la avalancha de preguntas que he recibido a través del blog,  sobre la enfermedad del ciervo zombi, acá va este artículo para responder a todas sus inquietudes.

¿Qué es la enfermedad del ciervo o venado zombi?

Es una enfermedad, también conocida como Caquexia Crónica que afecta el sistema nervioso del venado y el alce.
Esta enfermedad es similar a un grupo de enfermedades conocidas como encefalopatías espongiformes transmisibles. Dentro de este grupo de enfermedades se encuentran:
  • La “tembladera” en ovejas y cabras
  • La encefalopatía espongiforme bovina (muy conocida como el mal de las vacas locas)
  • La enfermedad de Creutzfeld-Jakob en el hombre (afecta a una persona en 1 millón, y su pronóstico es mortal)
Estas enfermedades son causadas por priones, una forma anormal de una proteína natural presente en el sistema nervioso.

La enfermedad fue reconocida por primera vez en 1969 en un establecimiento de investigación de la vida salvaje en Colorado.

¿Cuáles son los síntomas?

  • Debido al deterior del sistema nervioso se puede observar en los animales afectados lo siguiente:
  • Decaimiento
  • Expresión facial en blanco
  • Rechinar de dientes
  • Pérdida de peso
  • Caminar con patrones repetitivos fuera de lo normal
  • Falta de coordinación, tropiezos
  • Cabeza y orejas caídas
  • Agresión o apatía

¿Cómo se transmite la enfermedad del ciervo zombi?

Por el momento hay una comprensión incompleta sobre la transmisión de la enfermedad. Se sabe que esta enfermedad es altamente contagiosa y se transmite por vía horizontal habilitada por el desprendimiento de priones en las excretas y su persistencia en el medio ambiente.
La enfermedad del ciervo zombie se desarrolla lentamente, con períodos de incubación prolongados. Se ha observado que con la inoculación experimental del ciervo el período de incubación es de 2 a 4 años.
La enfermedad se ha encontrado en ciervos y alces de un año de edad, así como en animales adultos de hasta 15 años.
Los síntomas clínicos incluyen cambios físicos y de comportamiento. Todos estos síntomas pueden ser sutiles tempranamente en la enfermedad. El diagnóstico basado en los signos clínicos no es confiable y son necesarios los análisis patológicos o bioquímicos del tejido cerebral o linfático. Estos revelarán la vacuolación neuronal y los cambios espongiformes, la astrocitosis y la acumulación de PrPSc en el cerebro o los depósitos de PrPSc en los tejidos linfoides.

La enfermedad está experimentando una propagación dramática en América del Norte, además, se ha encontrado en Corea del Sur y, recientemente, se ha identificado por primera vez en Europa en renos de corral (Rangifer tarandus tarandus) y alces en Noruega.


¿Puede el ser humano contraer la enfermedad del ciervo zombi?

Para responder esto vayamos por partes:
La caza de ciervos y el consumo de venado son muy comunes en América del Norte. Por otra parte, la distribución geográfica y los números de casos de ciervos y alces con esta enfermedad están en constante crecimiento, por lo tanto la exposición de los humanos a estos priones es probable. Sin embargo, hasta la fecha, la encefalopatía espongiforme bovina es el único ejemplo de transmisión interespecífica de la enfermedad priónica a los humanos. La posible transmisión zoonótica de la enfermedad del ciervo zombi es un problema alarmante y todavía una pregunta abierta.
Aunque la evidencia recopilada hasta el momento está a favor de un bajo riesgo de transmitir la enfermedad a los humanos, los resultados de estudios in vitro indican que la barrera de la especie no es absoluta.

¿Por qué la enfermedad del ciervo o venado zombi se expande?

  • Porque  por una parte, a pesar de que las políticas de manejo para animales en cautiverio a través de la cuarentena y la despoblación de los rebaños afectados por la enfermedad del venado zombi parecen ser eficientes, los intentos de controlarla  incluso en instalaciones confinadas fracasan debido a la persistencia de la infectividad en el ambiente.
  • Por otra parte, el manejo de la enfermedad del ciervo zombi en animales en libertad es un desafío aún mayor.
  • La ausencia de una vacuna eficaz a pesar de los considerables esfuerzos para desarrollar esta estrategia hace que la erradicación completa de la enfermedad no sea realista hasta la fecha.
  • Además, los largos períodos de incubación, los signos clínicos tempranos sutiles, un agente infeccioso resistente en el medio ambiente y la comprensión incompleta de la transmisión restringen las opciones para controlarla.
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Referencia:
1- S. Hannaoui, et al. Chronic wasting disease: Emerging prions and their potential risk. PLoS Pathog. 2017 Nov; 13(11): e1006619.
2- NJ. Haley, et al. Chronic wasting disease of cervids: current knowledge and future perspectivesAnnu Rev Anim Biosci. 2015;3:305–25.
 
3- SL. Benestad, et al. First case of chronic wasting disease in Europe in a Norwegian free-ranging reindeerVet Res. 2016;47(1):88.
 
4- S. Gilch, et al. Chronic wasting diseaseTop Curr Chem. 2011;305:51–77. 

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