Combatir el acné con aceite de coco, ¿mito o realidad?

Mitos y realidades sobre eliminar el acné con aceite de coco. ¿Quién no ha sufrido alguna vez a causa del acné? Muchos lo han padecido durante la adolescencia, aunque no fue mi caso. Pasé esa etapa con una piel espléndida, y en aquel momento pensé:  «listo, si no lo tuve hasta ahora, ya está». Sin embargo, no fue así. Empecé la facultad y el estrés revolucionó mis hormonas. Por suerte para mí, no fue de gravedad y se limitó a las fechas de exámenes.
El gran problema del acné se genera cuando las lesiones avanzan dejando secuelas físicas provocadas por la inflamación, lo que genera variaciones en la pigmentación y/o cicatrices. Muchas veces estas secuelas desencadenan problemas emocionales: baja autoestima, depresión, ansiedad y/o aislamiento social.
El peróxido de benzoilo se utiliza para el tratamiento del acné, pero genera efectos secundarios como enrojecimiento y resequedad en la piel que mucha gente no tolera. En este post analizaremos la utilidad del aceite de coco como alternativa al peróxido de benzoilo.
 

Primero empecemos por entender qué es el acné y cómo se produce:

 
El acné constituye una patología dermatológica frecuente en diferentes etapas de la vida, siendo más prevalente entre personas adolescentes. Dentro de su fisiopatología intervienen diferentes procesos los cuales permiten la formación de una lesión inicial. Al analizar los diferentes componentes implicados en la fisiopatología, se destaca el papel de las hormonas, principalmente andrógenos.(1,2)
Las lesiones de acné en general se localizan en las zonas que poseen una densidad mayor de unidades pilo sebáceas como lo son el rostro, cuello, tórax superior y dorso. 
 
Esa lesión inicial es producto de diferentes factores como la sobreproducción del sebo por influencia hormonal y la hiperqueratosis folicular, esto hará que los folículos se obstruyan, con una mezcla de células y sebo. Si esta mezcla está en contacto con el aire se oscurecerá, formando los famosos puntos negros y espinillas. En cambio, si está recubierta por la superficie de la piel se formarán los puntos blancos.
En este ambiente se dará el sobrecrecimiento de una bacteria llamada Propionibacterium acnes (P. acnes) que se encuentra en la flora normal de la piel y se alimenta de los ácidos grasos del sebo secretados por los poros de las glándulas sebáceas.
El sobrecrecimiento de estas bacterias causa una respuesta inflamatoriaSe segregan sustancias químicas que dañan la pared de los poros. Lo que dará lugar a granos enrojecidos, pústulas, nódulos y lesiones de leves a severas.
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Fuente de la imagen
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El aceite de coco está formado principalmente por ácidos grasos saturados. Entre un 45 a 65 % está compuesto por ácido láurico.
 
El ácido láurico es un ácido graso saturado de cadena media, el cual tiene actividad antibacteriana frente al Propionibacterium acnes (P. acnes) y otros gérmenesDicha bacteria está vinculada al acné. (3, 4)
 
  • Se realizaron estudios para evaluar la propiedad antimicrobiana del ácido láurico contra P. acnes tanto in vitro como in vivo. La incubación de P. acnes con ácido láurico produjo propiedades antimicrobianas más fuertes que las del peróxido de benzoilo. Además, el ácido láurico no indujo citotoxicidad a los sebocitos humanos. Por otra parte, el estudio en ratones mostró que la inyeccción intradérmica y la aplicación epicutánea disminuyeron el número de P. acnes. Los datos obtenidos destacan el potencial del uso de ácido láurico como tratamiento alternativo para la terapia del acné. (4) 
 
 
  • El aceite de coco, además de inhibir el crecimiento de P. acnes, también inhibe la producción de andrógenos. Como ya lo he mencionado, uno de los factores desencadenantes del acné es la influencia hormonal, principalmente andrógenos. Para que esto ocurra, la hormona testosterona debe convertirse en 5α-Dihydrotestosterona (5α-DHT) por medio de una enzima llamada 5-α reductasa. La 5α-DHT regula la producción de sebo y la hiperqueratinización.
Existe evidencia científica de que el ácido láurico es capaz de inhibir la actividad de la enzima 5-α reductasa, lo que llevará a una menor producción de la hormona implicada en la regulación del sebo y la hiperqueratinización. (5, 6)
 
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Resumiendo:
El aceite de coco contiene un gran porcentaje de ácido láurico y este actúa, por un lado, inhibiendo el crecimiento de una de las bacterias implicadas en el acné, P. acnes. Y por otro lado, inhibiendo la producción de andrógenos, lo que llevará a disminuir la producción de sebo y la hiperqueratinización.
Por supuesto, siempre consultá tus dudas con un dermatólogo.
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Bibliografía:
1-Monestel Corrales MA. Acné de causas endocrinológicas. Med. leg. Costa Rica vol.33 n.1 Heredia Jan./Mar. 2016
2-Sari S., et al. The association between stress and acne among female medical students in Jeddah, Saudi Arabia. Clin Cosmet Investig Dermatol. 2017 Dec 5;10:503-506.
3-Huang WC., et al. Anti-bacterial and anti-inflammatory properties of capric acidagainst Propionibacterium acnes: a comparative study withlauricacid. J Dermatol Sci. 2014 Mar;73(3):232-40.
4-Nakatsuji T., et al. Antimicrobial property of lauricacidagainst Propionibacterium acnes: its therapeutic potential for inflammatoryacne vulgaris. J Invest Dermatol. 2009 Oct;129(10):2480-8.
5-Liu J., et al. Anti-androgenic activity of fatty acids. Chem Biodivers. 2009 Apr;6(4):503-12.
6-Raynaud JP., et al. Inhibition of type 1 and type 2 5alpha-reductase activity by free fatty acids, active ingredients of Permixon. J Steroid Biochem Mol Biol. 2002 Oct;82(2-3):233-9.

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